Con tanto impuesto creo que voy a tener que dejar de fumar en 2010. Con seguridad la mejor manera de combatir el tabaquismo es atacando los bolsillos de las personas; pero en realidad es una estrategia más culera la que usa el gobierno, sabe que los fumadores estaríamos dispuestos a pagar cantidades exorbitantes por una cajetilla. El tabaquismo ha sufrido un repliegue en los últimos años, afortunadamente, pero vemos que en la realidad lo que el gobierno quiere no es combatir de fondo el problema de salud, quiere explotarlo lo más que se pueda, está traficando con nuestros errores.
Por mí que aumenten los impuestos a los cigarros, ni pedo, vuelvo a los faros. Pero que aumenten el precio de las medicinas sí es una total falta de respeto, y de ética, sólo demuestra el interés del gobierno y de las farmacéuticas por rasguñar un poco más en los mercados más productivos. Nunca me ha sorprendido ni he negado la posibilidad de que haya personas muy interesadas en mantener al mundo enfermo, incluso personas con la intención de enfermarlo aún más; siempre he tenido esas teorías de la conspiración en un 50-50, nunca he sido capaz de confiar del todo en los teóricos de la conspiración o en el gobierno.
Afortunadamente no soy un experto en el tema de la economía, porque si lo fuera estaría igual de perdido que el gordito de Carstens. Es cierto que se necesita una reforma de fondo, pero más bien debería ser cultural. La posibilidad de pensar en una economía que no dependa del petróleo es ilusoria, no estamos en capacidades materiales ni ideológicas para competir de manera real en la economía global. Si queremos un cambio debemos modificar esas condiciones, deberíamos convertirnos en verdugos y no en mártires, y las dos cosas son despreciables.
Sólo viviremos una puñetera vez, y eso a veces me pone de mal humor pensarlo. No se puede evitar andar perdido por la vida, pero cuando esa confusión es generada por nuestra falta de capacidades me pongo de peor humor. Lo del secuestro del avión es una prueba más a nuestro intelecto, no creo que sea una distracción, por definición sólo los estúpidos se distraen; y en verdad que yo no considero a ningún ser humano estúpido, bueno la verdad es que sí hay muchos.
Es lógico aumentar los impuestos en productos dañinos para la salud, y que son rentables. Lo que no es lógico es andar en una sociedad que no tiene sentido y que cada vez se va perdiendo más en sus errores, una economía que no funciona y nunca funcionara sólo significa que no pertenecemos a este mundo.
Mejor los delicados esta mas "wenos"
Betuel Mercado
12 de septiembre de 2009, 11:33No le vuelvas a decir gordito al marrano de Carstens o te retiro la palabra.
J.P.
14 de septiembre de 2009, 11:39